“BESO No. 1”
(¡Trenzas de a dos y miel!)

Mi primer beso,
me pilló de ronda
por un jardín de flores
imaginando ser una mariposita
de seda y colores.

Husmeando
cual sabueso mil olores
forme ecuaciones cuadráticas
con mi acelerada
y entrecortada respiración.

Mesmerizada
a labios sellados
y una risita inusitada.
Ansiolítica y callada
entretejiendo emociones
a flor de piel
en finas trenzas
de a dos y miel.

Cuando los abrazos,
las caricias,
las miradas
las palabras
y el mismo silencio
ya no significan nada
es ahí, donde
el primer beso emana.

Mi primer beso,
fue un confite inesperado
que mis labios saborearon.
Tierno, sosegado y tibio
en un atardecer de estío
y si no engaño
el preludio
a mis quince años.

© Elena Vargas